10.03.2011

Éste es un estado de demencia.
Las luces brillan a lo lejos, no se ven mucho porque aún es de día y el sol es más fuerte.
Nunca entendí a los viejitos que se sientan en el parque todo el día; están esperando. Esperan al amigo que jugará con ellos una partida de ajedrez, esperan a la chica en minifalda a la que le arranquen una sonrisa con sus ingeniosos halagos, esperan a que venga el embolador y les ponga conversa, o a cualquier persona con la cual puedan hablar del clima.
Acaba de sentarse uno a mi lado; me pregunta si me quiero tomar un tinto. Le respondo que no, porque el que venden está endulzado y yo no puedo consumir azúcar. Sonrío. Él ha recibido su sonrisa del día.
El tiempo pasa lento en este parque.
Las palomas pasan, comen, cagan, vuelan.
Hoy tengo 70 años y estoy sentada en el parque. Estoy esperando aún no se por qué.
Quiero una de esas paletas que vendían a 5 pesos.